Un Mundo perfecto, no necesitaría Dioses, pero se dice que incluso en el mítico Edén se sufría. Entonces la gente comenzó a rezar, a alzar plegarias en busca de ayuda y así nacieron los primeros Dioses. Dichas divinidades eran complejas y poderosas, además cada una tendría su propio dogma y su propio alineamiento, estas darían felicidad o tristeza al mundo que los había convocado. Sin embargo, los mismos Dioses, aunque poderosos tenían un límite y solo podrían ejercer su poder en las personas que creyeran firmemente en ellos, entre más creyentes más poder, así fue como el centro de su poder se erigiría en templos en donde los fieles irían a lanzar cánticos o sacrificar vida para dar poder a sus Dioses. Se dice que cada Dios tiene una criatura mítica a su servicio, como un avatar divino de su poder. Este titán ejercería su voluntad sobre los pueblos del Dios a que servían y así mismo llevaría su ira a sus enemigos. Ha pasado mucho tiempo desde el nacimiento del primer Dios y los conflictos generados entre los mismos. Una plegaria pura ha sido lanzada y algo ha despertado en el cosmos: el nacimiento de un nuevo Dios, que se precipita a gran velocidad desde el vacío hacia la tierra de Edén. Ese Dios, eres tú y junto a ti y tu fiel criatura con el consejo sabio de tu conciencia deberás decidir el destino de la gente de Edén. ¿Bueno o malvado? Tú decides, el futuro está en tus manos.
Seguimos en la tarea de recordar juegazos de antaño, Black and White no podría faltar en esa lista. Si nos trasladamos al pasado, no en mi primera consola, pero sí en mi primera PC oficial, este fue uno de los juegos con que disfruté más en su día, pasaba horas al cuidado de mis aldeas y de mi criatura, para mí era un juego espectacular que me dio horas y horas de sana diversión y sin lugar a dudas, es un juego que marco muchísima tendencia en su época. Es todo un gusto para mí poder escribir hoy sobre este grandioso título; hablaré de sus mecánicas, historia, gráficos y sonido. Por supuesto todo desde mi punto de vista, pero siempre tratando de ser objetivo, si ya lo conoces y te interesa saber mi opinión como si nunca lo hubieras visto y te interesa saber más, entonces te invito a continuar leyendo.
Black & White por su traducción al español, Blanco y Negro. Es un videojuego de simulación de Dios, este género te pone en el papel de una entidad superior capaz de ejercer un gran control sobre todos como podría ser en el mismo Black and White o en títulos tales como Los Sims o el mítico Populous. Black and White fue creado por la extinta Lionhead Studios, diseñado por Peter Molyneux y distribuido por Electronic Arts en el año 2001 para PC. El juego tendría una versión en consolas específicamente en Play Station pero esta nunca llegó a ver luz. La propuesta del juego nos mete nada más y nada menos que en la piel de un Dios con la responsabilidad y contrapartidas que ello podría suponer. Siendo el juego una mezcla de simulación, construcción, estrategia en tiempo real (RTS) y rol, además del cuidado y enseñanza de la criatura lo cual lo convierte en un juego bastante complejo, pero para nada difícil de entender con paciencia. El juego en sí mismo es muy amplio y contiene elementos muy variables entre sí, con un mundo enorme a tu disposición en donde habitan distintas culturas, animales, criaturas míticas y Dioses poderosos. Uno de esos Dioses eres tú mismo y serás capaz de moldear a tu antojo lo que te rodea con tus poderes divinos. No estamos ante un típico simulador de estrategia, el juego presenta lo mejor de varios géneros, pero a un ritmo más lento y más sofisticado. Aunque como todo juego puede tener sus defectos y sus virtudes.
Black and White es algo totalmente novedoso de cara a lo que había antes cuando fue lanzado en el 2001. Tan novedoso que era incluso inusual y los jugadores se encontraban con un juego tan distinto a lo acostumbrado que podría confundir o deslumbrar. Pongámonos en situación, eres un Dios y la mayor parte del juego eres representado con una mano en la pantalla que es lo que finalmente terminas controlando, no tienes un control directo sobre las personas, pero sí puedes influenciar en ellas o cogerlas a voluntad, si un día amaneces de malas incluso puedes decidir lanzarle lejos o ahogarlo o matarle contra las rocas. Claro que entonces estarías siendo malvado. En vez de eso podrías acortar su camino llevándole a casa o sanarle con un milagro de curación. El objetivo de un Dios pese a lo que pueda parecer en el juego es sencillo: obtener la adoración de la gente, esto se traduce al control de distintas aldeas que representan una civilización distinta: nórdicos, aztecas, japoneses, celtas, indios, griegos, egipcios y tibetanos con diseños tan variados como sus edificios. El juego se presenta en una perspectiva de cámara variable y no la típica isométrica de los juegos de estrategia, aquí podremos movernos y ver en cualquier dirección alejar el zoom para ver toda la isla o acercarlo lo suficiente para ver incluso a las hormigas. Como Dios puedes hacer casi cualquier cosa incluso hacer que sus aldeanos creyentes trabajen de forma más eficiente y ayudarles, ya sea regando sus cultivos o rellenando el almacén de grano uno mismo, lo cual hará que ganemos más creyentes. A medida que se gana más creyentes, nuestro poder como Dios aumenta y el límite de influencia crece, este límite se muestra en forma de un anillo de color del Dios, predeterminado en la campaña de un color rosa oscuro. Fuera de este anillo no podremos hacer nada, ni coger objetos ni usar nuestros poderes, pero a medida que va creciendo eventualmente cubrirá toda la isla sobretodo al fusionarse con la influencia ganada en otras aldeas. Por eso es muy importante convertir a nuestra fe a todas las aldeas posibles, pues cuanto más aldeanos creyentes tengamos, mayor será el territorio que controlemos y mayor será el poder de lanzar los milagros, pero ojo que ente más pueblos controles mayor será la responsabilidad pues deberás atender las necesidades y plegarias de cada una en mayor o menor medida.
Pero ¿Cómo ganas la fe de las demás aldeas? Simple, como Dios puedes fomentar la creencia en ti realizando cualquier hazaña divina. Esto se convierte no solo en una necesidad para ti, si no que puede llegar a ser muy divertido. Puedes lanzar objetos sobre la aldea, hacer llover sobre los cultivos, invocar un cuerno de la abundancia sobre el almacén y rellenar sus suministros, o invocar un bosque milagroso que les provea de madera, crear una bandada de pájaros milagrosos o si eres malvado lanzar bolas de fuego o rayos celestiales sobre sus chozas. La imaginación es el límite, pero los aldeanos por lo general se impresionan con cualquier cosa que se salga de lo normal, eso sí, si ven lo mismo varias veces terminaran aburriéndose. Es aquí donde se define también tu bondad o tu maldad, no es lo mismo impresionarles sanando a sus enfermos y regando sus cultivos, que quemar sus casas o arrojar por el aire a sus niños o lanzar rocas enormes sobre sus construcciones. Otra opción también válida es llevarte a todos los aldeanos de una localidad a otra que ya es tuya o enviar discípulos misioneros a aldeas remotas. Comprobarás que has ganado creyentes al ver numerosas esferas de colores (del color del Dios) ascender al cielo además de hacerlo en un número flotante que te indica cuantos creyentes has ganado, el número de creyentes necesarios se puede ver en el centro del pueblo y una vez superes ese número el pueblo creerá en ti, adoptando tú símbolo y la forma de tu criatura. Además de enviar constructores para erigir un altar alrededor de tu templo en donde irán a rezar y lanzar cánticos si lo ordenas ¿Cómo? Solo debes alzar o bajar el tótem en el centro del pueblo y en determinada cantidad los aldeanos acudirán a rezar, cantar y bailar. En general a adorarte lo cual te dará poder para lanzar los milagros, cada pueblo cuenta con determinados milagros que puedes ver en el centro del pueblo y es allí donde ganarás el poder de usarlos. La relación Dios y creyentes es intrínseca, pues es lo que define el poder del Dios, si te llegas a quedar sin creyentes desaparecerás.
Como imaginarás no eres el único Dios, otros Dioses pueblan las diferentes islas con sus propios creyentes y tienen los mismos objetivos que tú, ganar fieles y convertir a su fe a las diferentes aldeas. Estos Dioses pueden ser amistosos o fieros enemigos, estos últimos pueden amenazar la seguridad de nuestras aldeas masacrando nuestros aldeanos o enviando a su criatura a destruirlas. Aunque para ello contamos con milagros protectores o nuestra propia criatura. Sin embargo, Black and White es un juego que requiere tiempo y paciencia, pues convertir los diferentes pueblos toma su tiempo, sobretodo si ya pertenecen a otro Dios. Además, entran en juego otros factores, los pueblos, aunque tienden a ser autosuficientes en términos de que los aldeanos trabajan constantemente, suelen tener diferentes necesidades, pues sus reservas de comida y madera tienden a disminuir a un ritmo alarmante y deberás estar pendiente de sus necesidades. Estas necesidades no solo es la comida, también la necesidad de procrear o una vivienda e incluso de protección si algo les amenaza. En estos términos los aldeanos tienden a ser un poco vagos y deberás están constantemente pendiente, para ello deberás crear a distintos discípulos que harán tu obra en la tierra: granjeros, leñadores, procreadores, constructores, pescadores y artesanos. Son algunos de los que puedes nombrar. El proceso para crear un discípulo es simple, debes cogerlo y soltarlo a un lado de lo que quieres que se dediquen, por ejemplo, si coges a un aldeano y lo sueltas a un lado de un árbol lo vera como una visión divina y se hará leñador. Aunque muchos aldeanos serán leñadores o granjeros sin ser discípulos, estos últimos son más eficientes, pero no es buena idea nombrar tantos discípulos, pues estos solo se dedicarán a su trabajo y no acudirán a orar al templo si los llamas.
Los aldeanos no procrean solos, debes nombrar discípulos para aumentar la población. No construyen solos, debes disponer donde deben construir. Este proceso de construcción, aunque divertido, puede llegar a estresar a más de uno, sobretodo si no se cuenta con los recursos apropiados. Para construir es preciso que primero construyas andamios en un taller, esto requiere un suministro constante de madera que puedes dejar tú mismo o la van cargando los artesanos. Una vez se crean los andamios deberás colocarlos en el mapa, en el lugar que quieres que construyan, los diferentes edificios necesitan uno o más andamios. Uno y dos para las casas, tres para los edificios públicos, cuatro para las granjas, cinco para centros del pueblo y hasta siete para edificios enormes y complejos llamados maravillas. Pero no termina allí, aun después de colocar correctamente el andamio, aparecerá una sombra del edificio tal y como será, pero el edificio en sí requerirá aún más recursos y suficientes aldeanos para construirlo. Esta puede llegar a ser una tarea ardua a diferencia de otros títulos de estrategia y gestión.
Como puedes ver el juego es complejo, pero te invita a disfrutarlo, sin embargo, aprender todo lo que se requiere para avanzar de forma eficiente toma su tiempo. Además, el juego no presenta una interfaz como tal, no veras menús desplegables ni nada en pantalla y de entrada no sabrás muy bien que hacer. Casi todo lo haces con el ratón ¿Cómo? Pues con gestos. La mano que controlas es tu herramienta principal, con ella puedes coger a los aldeanos o modificar el terreno o incluso andar, si mantienes pulsado el botón izquierdo del ratón y lo mueves hacia adelante, la mano se enganchará al suelo y la arrastrarás para desplazarte, aunque esto también lo puedes hacer a la larga con el teclado. Pero muchas otras cosas no, por ejemplo, la forma general de lanzar milagros o realizar las diferentes tareas deben hacerse con gestos, estos gestos se realizan al desplazar la mano y dibujar, por así decirlo diferentes símbolos en el suelo, cada milagro tiene un símbolo distinto que conviene aprender, aunque puedes visualizarlo en una esquina de la pantalla y aunque también puedes hacer clic sobre el milagro en el templo, si estás alejado del mismo deberás aprender sí o sí a realizar los gestos para no verte obligado a estar regresando una y otra vez al templo. Otra tarea que no puedes realizar con el teclado es coger objetos y lanzarlos, deberás hacerlo con el ratón, cogiendo el objeto y manteniendo presionando el botón para posteriormente desplazar la mano y soltar el botón en el momento justo para lanzar el objeto, esto indicará no solo la dirección en que lanzas el objeto si no la fuerza con que lo haces.
Aunque las mecánicas son complejas esto no acaba aquí y es que no solo deberemos atender a los aldeanos y lanzar milagros. Lo más llamativo de Black and White son sus criaturas. Cada Dios tiene una criatura, este titán es tu avatar en Edén. La criatura es como un hijo al que debes enseñar a comportarse y de esa enseñanza se creará su personalidad. Además, la criatura puede aprender todo lo que le enseñes y observa cada movimiento que haces copiándolos. Incluso puedes enseñar a crear los poderosos milagros, aunque es buena idea enseñarle donde, como y cuando debe usarlos. Obtendrás a la criatura al principio del juego y será parte fundamental del mismo, lo cual, si bien aumenta de nuevo su complejidad, también es absurdamente divertido. La criatura comienza siendo solo un bebé o un niño curioso que no sabrá qué hacer o qué errará en lo que hace y deberás dictarle lecciones desde entonces. ¿es buena idea que se coma los aldeanos? Si eres bueno, definitivamente no. Si eres malo quizá no te importe. Para enseñarle lo que es bueno o es malo deberás hacer uso de la mano y el ratón como de costumbre. Si pasas la mano suavemente sobre la criatura la acariciarás indicándole que lo que hizo está bien. Por el contrario, si mueves la mano bruscamente sobre ella le das una bofetada lo cual le indicará que lo que hizo está mal. También dispones de tres correas que puede usar para dejarla atada en un lugar específico o indicarle ir a algún lugar según tus deseos. Una correa sirve para el aprendizaje y es mejor llevarla siempre que le enseñes algo o incluso puedes amarrarla en el pueblo entonces la criatura aprenderá de los aldeanos por ejemplo a usar el almacén. Por otro lado, existen dos correas especiales una la hará ser más amable y otra la hará enfadarse y ponerse iracunda. La criatura puede aprender casi cualquier cosa, puedes enseñarla a regar cultivos y se hará granjera o puedes enseñarle a destruir las aldeas vecinas y enviarla sembrar terror. Incluso puede aprender a bailar o también puedes enviarla en modo misionera para impresionar a los aldeanos de otras aldeas y aumentar su fe en ti.
La criatura tendrá su propia alineación que por lo general va de la mano con la tuya, aunque no siempre es así, puedes ser un Dios malo con una criatura buena, por ejemplo. Puedes enseñarla a ser compasiva, modesta y diligente lo cual sin duda te ayudará no solo con tu propio pueblo si no a conquistar aldeas vecinas. Pero también puede enseñarle a ser odiosa y destructiva lo cual puede también complicarte la vida si decide comerse a tus propios aldeanos o destruir tus propios edificios. La criatura irá creciendo a medida que come y duerme, su alineamiento también irá definiendo su forma y apariencia. Esto se hará de forma sutil pero llegado cierto momento se verá un resultado, una criatura brillante y hermosa de colores o una horrorosa bestia rodeada de oscuridad. Además, estas pueden llegar a ser tan altas como montañas. Este alineamiento también afecta al Dios y su templo, independientemente de la criatura, si el Dios es malvado su mano será roja y garruda, su templo será oscuro, lleno de picos y murciélagos. Por el contrario, si es bueno su mano será blanca, brillante y su templo será un lugar de paz rodeado de palomas y otras aves hermosas. Las diferentes criaturas que pueblan el mundo de Black and White son variadas, comienzas con una vaca, un tigre o un mono. Posteriormente irás encontrando diversas criaturas que puedes conseguir en retos o intercambios, algunas se descargan de internet incluso, las criaturas también pueden enfrentar a otras criaturas en un círculo de combate al más puro estilo de las artes marciales o el boxeo, muy divertidas en la que deberás ayudarle clicando sobre el enemigo para golpearle, clicar sobre ella misma para que se defienda o realizar gestos para que ejecute milagros en medio del combate un gran punto a Lionhead y Peter Molyneux por crear esta maravilla.
Ya hemos hablando suficiente de las mecánicas, que son muchas he de reconocer. Ahora hablemos del argumento. La campaña de un jugador nos pone en la perspectiva de un Dios recién invocado al mundo de Edén, pronto se nos revelará el primer enemigo, así como los primeros amigos. Un Dios llamado “Némesis” busca destruir todo cuanto existe, planea ser el único Dios y por supuesto nosotros (incluida nuestra criatura) le estorbamos. La campaña se compone de diferentes escenarios que iremos recorriendo, estos escenarios son islas en la que debemos superar distintos retos o misiones para ir avanzando. Estas misiones se marcan con pergaminos de historia dorados y nos permiten continuar con la trama principal; mientras que los pergaminos plateados son misiones o retos secundarios bastante interesantes y divertidas. A lo largo de nuestra aventura por Edén nos acompañará nuestra consciencia buena o malvada. Un anciano bondadoso y amigable o un diablillo gordo y prepotente de intenciones malsanas. Ambos con una personalidad marcada que te harán partirte de risa en la mayoría de sus comentarios y gestos. Estos dos personajes nos serán de gran ayuda y nos guiarán en nuestro recorrido. Nuestra criatura también será parte fundamental de nuestra aventura y nos acompañará desde el momento en que la encuentras hasta el final, siendo una parte fundamental no solo del juego y sus mecánicas, si no de la historia en general. La historia en sí misma se mezcla con la jugabilidad y los diferentes retos secundarios para crear un juego épico, muy bien hecho en todos los sentidos que disfrutarás de principio a fin.
El juego además cuenta con un modo multijugador más que interesante, en donde te enfrentarás a otros jugadores siendo Dioses y sus criaturas en diferentes mapas, puede ser todo un reto enfrentarse al talento de otro jugador en multijugador, pero también puede llegar a ser muy divertido. El chat integrado hace que aparezcan bocadillos en tu propia criatura para simular que esta está hablando. Lamentablemente el soporte online hace tiempo que dejó de funcionar y tendrás que hacer uso de programas de terceros para hacerlo funcionar en redes locales o en servidores privados, una curiosidad es que cuando el juego fue lanzado podía conectarse a internet y copiar el clima local para manifestarlo en el juego, toda una pasada y una innovación.
Los gráficos son excelentes, aún hoy día puedes quedar maravillado con lo que ves. Los diseños de los grandes mapas son exquisitos, los árboles, los ríos y el océano. Las diferentes culturas tienen cada una un diseño único y bien elaborado en sus edificios y sus aldeanos. Puedes acercarte lo suficiente para contemplar en detalle sus rostros y el diseño que de cada estructura. Puedes también alejarte para contemplar toda la isla y los efectos de luces, el sol naciente o atardeceres de película, un cielo inundado de estrellas. El juego visualmente es impresionante, lleno de una cantidad inmensa de detalles muy cuidados. Las criaturas y su diseño, así como sus diferentes alineamientos son simplemente maravillosos con gran cantidad de expresiones faciales y gestos que expresan terror, alegría o tristeza. La ejecución de poderes divinos son una gozada, desde nubes de tormenta, rayos divinos, luces blancas de sanación, esferas ardientes de fuego que pueden incendiar un pueblo entero, los efectos especiales de cada milagro están muy mimados y perfectamente ejecutados.
El sonido en Black and White también es un punto muy a su favor, aunque no tenemos música de fondo para dar un ambiente más calmado y realista, los diferentes efectos de sonido no nos hacen extrañarla, podemos oír el mar, las olas chocando, los aldeanos hablando y aplaudiendo, los cánticos y música en el templo. El ruido de los árboles al ser talados o los martillazos al construir. También a tu criatura mugiendo o rugiendo, sin mencionar el sonido de los diferentes milagros que están también muy bien cuidados para representar correctamente el efecto especial que ejecuta. Oír el sonido de los truenos al lanzar una tormenta o el sonido del fuego crepitando o incluso el sonido del agua al caer es solo una de los pocos efectos de sonido espectaculares que acompañan el juego y no son nada molestas más bien son realistas, si te alejas no escucharás nada, si te acercas escucharás justo lo que tienes a un lado. Las actuaciones de voz son impresionantes y están perfectamente dobladas al español, tanto la voz en off del narrador como las de nuestras consciencias, las de otros Dioses y las de ciertos aldeanos que nos hablan para pedir nuestra ayuda. Como dato interesante los sonidos ambientales pueden variar ligeramente dependiendo de tu alineamiento.
En el 2002 se lanzó una expansión llamada Black & White: Creature Isle que se centraba en el cuidado de las criaturas y les otorgaba una IA más avanzada, a diferencia del juego original, solo visitábamos una isla gobernada por criaturas. En donde nuestra propia criatura se introduce, esta criatura era la misma del Black and White original, pero el juego se ejecuta de forma independiente. Aquí cada criatura tiene una personalidad bien marcada y propia incluso pueden hablar. Se presenta además la idea de una mascota o hijo de la criatura llamada Tyke que es un pollo, que puede aprender de ella todo lo que esta le enseñe. El juego en sí mismo es una gran colección de retos dados por las diferentes criaturas que pueblan la isla con la función de ganar su favor y poder ser así dignos de Eve; una criatura hembra que será la pareja de nuestra criatura y con la que podrá tener un hijo que sustituirá a Tyke al final de la aventura. El juego además añade nuevos modelos de criaturas entre ellas el ya mencionado pollo, un cocodrilo y un rinoceronte.
Qué más puedo decir, de este maravilloso juego. Black and White es un mundo enorme, vigorizante y adictivo, Se ve y suena espectacularmente bien. Sus mecánicas complejas crean una experiencia única que te dará horas y horas de diversión. Con un mundo totalmente abierto en donde puedes hacer prácticamente lo que se te antoje, sin mencionar a la criatura que es un punto añadido bastante épico. Hoy en día prácticamente cualquier PC moverá el juego con el nivel de detalle al máximo. El juego por otro lado pude ser complicado para el neófito, pues no estamos ante un RTS (real time strategy) común. No es un juego frenético y lleno de acción, por el contrario, es un juego bastante lento que se disfruta en ese ritmo controlado. Es una pena que no hayamos visto más títulos como este en años salvo su secuela (ya hablaré de ella) y aun espero por el día en que un juego me produzca una sensación similar a la que sentí la primera vez que jugué Black and White. Si te gustan los retos y los juegos de gestión, estrategia, mejor aún te gusta jugar a ser un Dios. Entonces Black and White te encantará. Lamentablemente conseguir una copia original es muy difícil y no se encuentra disponible en ninguna plataforma de juego como Steam, Origins o GOG. Así que tendrás que buscar otros medios para jugarlo, pero sin duda lo recomiendo ampliamente, el juego en sí mismo es toda una obra de arte que merece ser jugada al menos una vez en la vida.
La verdad es que no recuerdo el tirón y éxito que tuvo el juego en su momento pero sí que recuerdo verlo en la portada de un número de la revista Micromanía como juego del mes... y yo queriendo tenerlo, obviamente.
La pena es que nunca pude probarlo, ni en su versión 'Jack Sparrow' (ejem ejem... ya me entiendes) y reconozco que hoy en día no es de los estilos que más me atraen, pero bueno, nunca se sabe :)
El artículo a pesar de estar un poquito extenso fue entretenido la propuesta muy interesante y me hizo recordar cuando se mandaban más aldeanos a rezar para que llegara más rápido el ***án en AoE Mythologies XD
jaja juegazo
Pues es uno de esos juegos que terminan sorprendiendo, igual y no es lo típico que has jugado, yo todavía lo disfruto cada vez que lo juego :)