El juego que quiere revolucionar el MMORPG

Guardians of Embers es un juego de acción MMORPG con elementos Hack-and-Slash que cuenta con una variada opción a la hora de caracterizar a tu personaje. El juego promete largas horas de aventura para realizar solo o en compañía de amigos fiel a su estilo RPG. Fue publicitado como "revolucionario" y "único" por sus desarrolladores e incluso decían que podía ser un sucesor de los clásicos de oro como el World of Warcraft y la saga Diablo.

Desarrollado por Gameforge, reconocida compañía que nos trajo Elsword, Ikariam y Tera, entre otros, Guardians of Embers fue lanzado con el objetivo de ser revolucionario y único entre los tantos MMORPG que se juegan en estos días. Es por eso que los elementos Hack-and-Slash fueron los más destacados a la hora de promocionarlo, dándole énfasis a la cantidad de combos y ataques que se les podían hacer a un gran grupo de enemigos.

Sin embargo, el aspecto más destacable de este juego es su sección de caracterización. Pudiendo elegir entre cuatro razas: Humanos, Elfos, Enanos y Neia. Este es apenas el primer paso a la hora de crear tu personaje. Luego, puedes caracterizarlo de la manera que quieras siendo limitado solamente por la apariencia general de la raza que has elegido, desde aquí tienes varias opciones desde masa muscular, cabello, tamaño de ojos, etc. Una vez que hayas terminado en darle el aspecto que quieras hay que elegir la clase que vas a desarrollar, las cuales son: "Knight", "Priest", "Arcanist", "Engineer", "Ranger" y "Dark Knight", algunas son clásicas de los RPG así que recomiendo usar una que sea exclusiva de este juego, y de ahí ir subiendo de nivel las habilidades que quieras priorizar, el sistema de atributos es algo complicado pero hay opciones para poder resetearlo. 


Las primeras horas de juego se pasan bastante rápido ya que hay gran variedad de misiones y monstruos que enfrentar. La historia está dividida en seis capítulos confirmados, también cuenta con eventos que se hacen por temporadas y un mapa extenso para realizar encargos, misiones o aventuras de la mano de personajes de este mundo.

El problema surge cuando ya llegas a un nivel por encima del promedio, llegado a este punto subir de nivel se hace lento y los enfrentamientos se vuelven repetitivos. Además de que los elementos Hack-and-Slash no son tan variados por lo que caen en lo génerico, y el enfrentarte a varios enemigos a la vez no es muy buena idea ya que a menos que estés en un nivel muy alto, lo cual requiere un farmeo prolongado, terminas siendo sobrepasado por los enemigos. Esto sumado a la poca cantidad de jugadores en los servers hace que la experiencia no sea del todo satisfactoria.

En conclusión, Guardians of Embers no es revolucionario en lo que respecta al género, pero se disfruta si se lo toma como un RPG de navegador. El juego en sí no es de los que te atrapa para jugarlos toda la noche pero sirve para disfrutar de una experiencia fiel de un MMORPG sin irse a los títulos grandes como el War of Warcraft, Diablo o MU.