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La historia tiene lugar en Arcadia Bay donde encarnamos a Max Caulfield, una estudiante de fotografía, descubrimos al poco que tenemos el poder de viajar a través del tiempo usando nuestras fotos logrando una especie de efecto mariposa para cambiar los eventos del pasado.
El juego se encuentra a caballo entre aventura gráfica con un telltale, lo cual limita mucho nuestras opciones, ya que a veces parece más una película jugable que un juego, como parte buena, tenemos el poder Max, al rebobinar el tiempo podemos desde modificar acciones realizadas que no hayan funcionado, modificar la respuesta de algunos npcs, o aprender algo necesario de un personaje, volver al pasado y al interactuar con este modificar las líneas de diálogo. Tampoco pierdes objetos al rebobinar, por lo que algunos puzzles requieren que obtengas un objeto y rebobines.
Los personajes inicialmente son muy arquetípicos, Chloe (la mejor amiga de Max) es una rebelde, por lo que desobedece a todo el mundo, fuma, viste de forma punky... pero más adelante el personaje se va desarrollando y se explica el por qué de este comportamiento. Así ocurre con todos los personajes ajenos a Max, vas descubriendo sus historias, los haces parte de tu entorno y les coges cariño, por eso este juego es grandioso, la historia, la manera de tratar a los personajes, como están desarrollados y escritos.
Al poco tiempo de empezar deja de ser un juego, o una película con interacción, para ser la historia de Max, quieres saber como avanza, qué ocurre, como puedes salvar a ese personaje que está entrando en crisis, te preocupas por Max, de las consecuencias de sus actos, ya que tienes el poder de modificar algunos momentos del pasado...
El juego hace que todos parezcan culpables. El niño rico con una pistola, el profesor hipster, el padrastro que necesita controlar su ira: estos y otros personajes tienen mucho que esconder, nosotros iremos descubriendo poco a poco que es lo que traman, o cuales son sus motivaciones. El tornado que se avecina y la destrucción futura del pueblo nos impulsan con urgencia a resolver los problemas que nos encontremos.