A inicios de este año 2018, Milesonte lanzó a la venta Monster Energy Supercross y a su vez también Gravel, el juego del que hablaré en el este artículo. Acostumbrados a que nos ofrezcan principalmente simuladores, Gravel que salió para las consolas de PlayStation 4, PC y Xbox One es un arcade de conducción concretamente uno Off-Road. En el que hay que ir superando pruebas de distintas disciplinas como cross country, wild rush, speed cross y stadium city.
Con este propósito deberos superar cada una de las pruebas a fin de poder abrir el siguiente bloque de pruebas o episodios como gustes llamarlo, gracias a la acumulación de estrellas. Conseguimos una al finalizar cada carrera, pero conseguimos más si ganamos. La fórmula de conseguir estrellas para desbloquear nuevos episodios o bloques de pruebas no es original.
De hecho, ya lo hemos visto en varios juegos de conducción, pero en Gravel funciona perfectamente al dejarnos llevar por las distintas localizaciones de esta gira mundial, en la que debemos convertirnos en el Ultimate Off-Road Master.
Conforme acumulamos ciertas estrellas se desbloquea el siguiente episodio, estos episodios incluyen pruebas a realizar y son principalmente carreras de circuito, carreras eliminatorias, check points, entre muchos otras. Añadiéndose, una carrera contra uno de los líderes de las distintas disciplinas, cada uno con una serie de pruebas.
Conforme aumentan nuestros éxitos, conseguiremos nuevos vehículos especiales que se incorporan a nuestro garaje. Cada uno de estos vehículos se comporta de una forma distinta al resto, presentando un control más exigente según su potencia, la climatología adversa y el tipo de suele por el que rodamos que puede ser tierra, nieve, asfalto (pista) o arena.
(La imagen se ve así por el efecto del agua, pero es de buena calidad)
En el género de la conducción no a todos nos suelen gustar las distintas clases de pruebas y en ocasiones, pues dejamos aparte alguna de ellas hasta que no sea estrictamente necesario jugarlas para avanzar. Sin embargo, esto no sucede en Gravel, pues toda su oferta se hace entretenido, divertido y apetecible. Desde las pruebas de reflejo en las que tienes que pasar por los indicadores de luz verde a los circuitos, eliminatorias, entre muchos otros. En el que da gusto adentrarse gracias a su amplia variedad de oferta en disciplinas y circuitos a superar.
Además del modo principal de juego, Gravel ofrece también Free-Race, contrarrelojes y retos semanales. Así como también el matchmaking online, modo que se deja bastante de lado al presentarse como un simple añadido.
Gravel es un juego enfocado en single player (un jugador) que engancha, que te atrapa por el tipo de pruebas, por sus localizaciones, por el control arcade con el estilo de Milestone, por el propósito de conseguir puntos y puntos al realizar derrapes, saltos, conducción a toda velocidad, por la estructura de los trazados, por las ganas de ir superándonos en nuestra conducción y porque también es rejugable.
Gracias a los rebobinados que son habituales en muchos de las propuestas de Milestone podemos rectificar en caso de colisión, salirnos de la pista o para retomar mejor el trazado. La conducción es amigable y el control responde muy bien a nuestras ordenes, dominar el peso del vehículo y sacar partido del freno trasero y demás vuelve a ser básico en un juego de este estudio italiano.
Acostumbrados a la exigencia de los títulos de Milestone, Gravel me ha parecido mucho más asequible (quizás demasiado), les aconsejo subirle el nivel de dificultad, activar los daños reales y desactivar todas las ayudas, de tal forma que obtendrás mejores recompensas. Bosques, playas, centros urbanizadas, circuitos, todo es válido para ofrecernos estas carreras extremas.
La ambientación que nos rodea nos traslada a tremendas pistas que nos aguardan con sus curvas, saltos y zonas complicadas a dominar. Además de conducir en distintos usos horarios, también hace acto de presencia en algunas pruebas la lluvia y la nieve, aportando un plus de dificultad al control del vehículo.
Gravel utiliza el Unreal Engine 4, pero queda lejos de impresionar, ya que se aprecia que hace falta detalles tanto en los vehículos como en los entornos. A pesar que vemos estampas llamativas o habituales que nos acompañan, tienen un acabado flojo en este aspecto. Quizás una actualización creo que necesaria podría abordar una mejor definición y configurarlo en un acabado más justos para esta interesante propuesta.
La localización del título es absoluta tanto menús, como texto y locuciones están doblado al español, aunque es una lástima que se repitan frases en exceso al inicio de algunas carreras. Así pues, Gravel es un juego interesante, recomendable al que le han dado un acabado gráfico algo flojete, pero bueno.
Muy buen articulo cerberus4, eres una maquia de escribir wom siempre veo articulos tuyo xD, yo es ahorita que tengo tiempo de hace 2 por dias.