Bad North - Reseña

¡Hola Gamehag!
Recientemente me he encontrado en un frenesí de vicio a un juego que, a priori, parece un indie simplón. Este juego se llama Bad North. El caso es que decidí hacer esta mini reseña para compartir mi experiencia y, porqué no, conseguir algunas gemas en el proceso. ¿Comenzamos?

- Bad North -

- Destaco que las imágenes que van a ver a continuación NO son de mi autoría, las tomé prestadas de nuestro amigo Google -

No te dejes engañar por los bonitos efectos de sonido o los adorables sprites: Bad North no es un nuevo amigo encantador. Está aquí para robarte el tiempo, golpearte y posiblemente quemar tu casa. Al menos,  yo quería quemarlo todo después de que perdiera todo mi progreso por un error bobo, por tercera vez.



Es un juego de estrategia simple, casi más cerca de ser un rompecabezas. Hay que defender una pequeña isla cuadrada, o más concretamente, las casitas de campo que la rodean. Tienes hasta cuatro unidades para detener las olas de invasores vikingos. Bad North se trata de arrastrar las unidades para asegurarte de que alguien esté en la playa listo para recibir a los enemigos que se aproximan. Las complicaciones surgen con olas más frecuentes y varios tipos de enemigos que requieren diferentes unidades para contrarrestarlas. La verdadera clave de cada batalla es descubrir los puntos de ahogamiento en las islas, colocando a tus tropas donde puedan marcar la mayor diferencia sin perder tiempo marchando de un extremo a otro de la isla.

Te atrae con algunas misiones de apertura alegre. Olas lentas de oponentes, probabilidades fáciles, islas básicas con diseños claros.Pero pronto, una misión que se ve igual que las últimas tiene sólo una ola extra, un nuevo tipo de enemigo, sólo un pequeño extra para atraparte con la guardia baja. Para darte cuenta de que tu progreso ha sido aplastado por una mala decisión, enviándote de vuelta al principio para comenzar la campaña nuevamente.




Tus unidades son sólo grupos de ocho o más tipos pequeños, y con cada combate disminuyen. Necesitas enviarlos a una casa para reabastecerlos o arriesgarte a perderlos para siempre, pero mientras están recuperando sus números son incapaces de responder a cualquier atacante. Hacer la llamada en el momento equivocado te costará caro. Pierdes todas tus unidades y se acabó el juego, de vuelta al principio.

Es un castigo extremadamente duro para un juego con una presentación tan suave. Mover tropas es como jugar con una pequeña caja de juguetes. El suave viento y las olas hacen que cada isla se sienta como un pequeño y encantador refugio, las cabañas que salpican las islas se suman a esa agradable salubridad. Es todo tan simple y evocador. Claro, suena alguna música siniestra y hay algunas manchas de sangre después de una batalla, pero apenas se nota cuando el resto de lo que hay en la pantalla es tan bonito.

Es difícil determinar si la naturaleza engañosa es parte del punto de este juego o daña lo que inicialmente parece una experiencia de estrategia placentera y relajada. Respondes a los atacantes que se te acercan con cuidado pero fácilmente, una buena alternativa a los juegos de estrategia más exigentes. Sin embargo, todo eso se convierte en una moneda sin valor con un solo error. La consecuencia del fracaso se siente en desacuerdo con el ritmo pausado del combate.




Hay un mapa de campaña, generado al azar con cada nuevo juego, del que preocuparse entre misiones, en el que se aplican mejoras y se elige la isla que se va a abordar a continuación. Recibes más recompensas dependiendo de cuántas cabañas sobreviven al final de un nivel. Las usas para nivelar tus unidades, lo que te permite especializarte en piqueros o arqueros, y elegir habilidades especiales. Todo es bastante sencillo, pero, al igual que las propias misiones, no hay lugar a los errores. Elige la isla o habilidad equivocada y ya está, eso es todo, sin repeticiones.

- Conclusión -

Si puedes soportar las duras consecuencias del fracaso, entonces Bad North es un gran juego de estrategia, perfecto para jugar en un descanso o en ráfagas cortas. Sigo reiniciando a pesar de las fallas y los reinicios, así que probablemente eso dice mucho de lo convincente que es. Hay algo en ver a esos pequeños sprites golpearse unos a otros que me hace volver. Al menos hasta que termine por quemar mi casa.

Como nota final, me parece justo un 7.5/10.

- Pronto, más y mejores reseñas de juegos. Stay tuned! -